Cáncer de mama VIII

Hace menos de una semana terminé con la última dosis de quimioterapia.  Paclitaxel finished, por fin! Ahora solo queda recibir la vacuna Trastuzumab (Herceptin) cada 3 semanas por medio año mas, iniciar el tratamiento de radioterapia y hacer los controles que los médicos sugieran necesario hacer.

Estos últimos meses han sido muy duros.  El cuerpo físico no llega a recuperarse del tratamiento semanal de medicamento y ha ido acumulando una sobredosis que se siente sobretodo en el sistema digestivo.  La inflamación interna se siente tan grande que practicamente me inmovilizó en casa, la anemia aunque leve tambien sumaba, lo mismo que la agitación excesiva del corazón por tan solo subir escaleras.  Gracias a Dios, nada de esto ha sido de gravedad, todo ha estado dentro de los síntomas y efectos esperados, se puede decir que todo ha ido bien...y no solo físicamente hablando.

Las caídas físicas repercuten en el estado emocional es indudable y como todo ser humano he tenido razonables depresiones, (como si pudieran ser "razonadas"!), rebeliones y conflictos internos, desilusión y desgano hasta de la vida misma a ratos.  Pero todo esto me ha venido por oleadas.  Pasaba la marea alta y venia una calma, un hilo de luz me llegaba a nutrir e inspirar siquiera un poquito, hasta que venia otro bajón. 

Una linda amiga se ofreció a hacerme reflexoterapia, esto me ayudó mucho tambien.  Y con ella vino un libro que tambien fue bueno leer por esos dias, se titula "La Reconexión" de Eric Pearl, en otro post comentaré sobre él.  El hilo de luz se hizo mas grande, era una rendija que poco a poco, oleada tras oleada me iba re-cargando, re-conectando con la Luz Infinita un poco mas.

He aprendido bastante pero siento que aun no terminó la lección.  He conocido a muchas personas pasando por esta misma experiencia con una visión bastante limitada de su enfermedad y eso me hace pensar mucho en que debemos hacer algo para tratar de ayudarnos desde otra concepción de nosotros mismos, donde cada uno se hace responsable de su vida, de su salud, de sus decisiones, sin echar culpa al sistema, a la herencia, o a la enfermedad.  Debemos tratar de ver las cosas con una visión de mas largo plazo (sin dejar de vivir plenamente el presente) para poder entender la dimensión de nuestra experiencia actual y lograr alguna capacidad de entendimiento de la causa-efecto de ese sufrimiento.

No es fácil pero de eso se trata el aprendizaje.  Seguimos aprendiendo...