Brillar

"Existe un lugar adonde puedes ir,
donde tu corazón es libre
Hay un ritmo, perfecto para tu alma
Toma aliento, encuentra el coraje,
y logra el salto, tus pies saben siempre
a donde ir.
Y bailas y bailas, en un flujo perfecto
Dejando la oscuridad, entrando en el resplandor

Y el mundo entero verá cuando brillas..."

.....

El lugar perfecto donde podemos ir está en nosotros mismos. No hay que ir lejos.
Sólo bailar y bailar, en un flujo perfecto, osea ser felices, así es la forma perfecta de ser, porque así nos hizo nuestro Creador, para ser felices. Estar en paz, escuchar el silencio, oir las profundidades de nuestro corazón.
Solo entonces podremos brillar, dejaremos la oscuridad y entraremos en el resplandor.
Dejaremos los temores, angustias, preocupaciones, toda esa "oscuridad" que no quiere dejarnos brillar.

Y cuando lo logremos el mundo entero se dará cuenta del brillo, porque será tan diferente (grande) que todos lo notarán...

Para escuchar (cantar) esta canción y pensar...

Incremento de Asteroides

Aqui les dejo un reportaje sobre este tema.
Como mencioné en posts anteriores al hablar de este asunto, no es con la intención de alarmarnos, pero si de estar al tanto de estas cosas que suceden.

Espíritus de la Naturaleza



El tema del medio ambiente esta de moda. Recientemente el ser humano se ha dado cuenta que debe vivir en armonía con la naturaleza; está iniciando un cambio de conciencia al aceptar que no estamos solos en el planeta sino que convivimos con otros seres (algunos que no vemos, a ésos nos referiremos) y recursos que lamentablemente siempre se ha considerado que están a disposición del hombre para su explotación masiva y abuso indiscriminado. Recursos naturales que ahora ya son escasos y que si seguimos manteniendo el ritmo de vida y consumismo actual, muy pronto se agotarán.

Nuestros antepasados siempre supieron vivir en armonía con la naturaleza y hasta hoy se mantienen ciertas costumbres y creencias en los pueblos que se han mantenido alejados de la modernidad, es de ellos de quienes tenemos mucho que aprender.

En la cosmogonía andina, el poblador supo mantener el equilibrio en el uso de los recursos, su conciencia abarca no solo la dimensión física sino otras realidades que no vemos y de las cuales ya es tiempo que empecemos a ser concientes. La Pachamama o Madre Tierra es un ser vivo al que se le debe respeto y sobretodo profundo agradecimiento. Al vivir en ese estado de armonía con la naturaleza nos hacemos más concientes de respetar el medio ambiente.

La Madre Tierra alberga también en su seno a seres no físicos que así como nosotros forman parte de ella; seres etéricos llamados espíritus de la naturaleza. También son conocidos como elementos o elementales y se puede decir que son la esencia espiritual de cada elemento (fuego, aire, tierra y agua), están hechos de una sustancia etérea que es única y especifica a su elemento particular, son entidades vivientes parecidos a veces a los humanos en forma, pero habitando su propio mundo.

Para comprender esto debemos ser capaces de ampliar nuestro entendimiento y dar cabida a esto que es real: los seres humanos no somos la única línea de evolución que se desenvuelve sobre la tierra. Así como el ser humano ha evolucionado a través de los reinos mineral, vegetal, animal y humano y aun en el futuro nos espera una amplitud de posibilidades cuando alcancemos niveles superiores de realización; así, existe una línea de evolución de seres que habiendo pasado por el reino mineral deciden no ingresar a los reinos vegetal, animal y humano en el plano físico, sino que prosiguen su normal evolución en planos etéricos.

De este modo toman cuerpos exclusivamente de la materia de este plano etérico, para morar en el interior de compactas rocas o de la corteza terrestre, en las aguas oceánicas donde tienen su morada en las profundidades del mar o en las amplias llanuras del océano. No son seres físicos como nosotros, cuando son vistos es porque ellos así lo desean por alguna razón en particular, o porque el espectador tiene alguna capacidad de visión mas desarrollada que lo hace sensible de percibir esta materia o vibración etérica. Se dice que los niños cuando son pequeños tienen esta capacidad de “ver” que mas tarde con los años se va perdiendo.

A estos seres se les ha visto y frecuentemente oído en las cavernas y en las minas. En las minas de nuestros andes es conocido el personaje del muqui, una especie de duende pequeño. Carga una linterna y suele asustar a los mineros. En la literatura medieval se les dio el nombre de gnomos, palabra que deriva del griego genomo, que significa, el que vive dentro de la tierra, y literalmente así es, ya que lo hacen en cuerpos de materia etérica. En etapas posteriores de su evolución se convierten en hadas que suelen morar en la superficie de la tierra en sus cuerpos etéricos.

Estos seres huyen del hombre, evitan las ciudades populosas y se les encuentra en tranquilos parajes rurales, en las montañas y en alta mar. Los antiguos pobladores de los andes sabían bien de la existencia de estos espíritus de la naturaleza, por ello sus rituales de pagos a la tierra para agradar a los espíritus, a los apus y a la misma pachamama son hasta la actualidad muy frecuentes en su vida cotidiana.

Su especialidad es traducir formas de pensamiento a formas físicas transformando patrones mentales en patrones etéreos y después en físicos. Solo se asocian a los seres humanos cuando encuentran de parte de éstos, colaboración y respeto hacia la naturaleza.

Los chamanes de las Huaringas, poderosas lagunas en la sierra de Piura, también invocan a estos espíritus cuando realizan sus rituales de limpieza o florecimiento en las lagunas. La entonación de cantos y sonidos de instrumentos, hecho aparentemente ingenuo, resulta en un tremendo poder oculto. Cada sonido en el mundo visible, despierta su correspondiente sonido en los mundos invisibles, poniendo en acción una u otra fuerza en el lado oculto de la naturaleza.

Es de este modo, cómo los espíritus de la naturaleza colaboran con ellos y de ahí surge la creencia en las propiedades curativas de estas aguas. Muchas personas viajan solamente a recibir este baño de limpieza y dan fe de haberse aliviado de sus penas o enfermedades.

A estos seres también se ha de atribuir lo que de verdad pueda haber en las extrañas leyendas y cuentos infantiles tan conocidos popularmente. Sin duda los creadores de tales historias tuvieron acceso a información de planos invisibles ya que por ejemplo en el cuento de la Cenicienta y los Siete Enanos, aquellos pequeños personajes enanos son gnomos, elfos o duendecillos, en la Sirenita se trata de un elemental u ondina del mar, Peter Pan también es un duendecillo y lo acompaña su amiga el hada Campanita, etc.

Lo que nos queda al respecto es abrir nuestra mente para aceptar su existencia como algo real, considerándolos no solo como personajes de cuentos de hadas sino como seres que colaboran con el reino humano en su evolución. Ellos sienten una permanente agresión de parte del hombre pues constantemente invadimos sus espacios, no con amables visitas de esparcimiento y sano disfrute de la naturaleza, sino con el propósito de la explotación abusiva de los recursos naturales con el único objetivo de la ganancia económica egoísta.

Cuando la explotación de la naturaleza llega a niveles inaceptables para ellos, peligra el equilibrio armónico de los elementos sobre la tierra, el agua, el aire y el fuego. Cuando el crecimiento demográfico, y en consecuencia la contaminación ambiental, alcanza niveles que sobrepasan la capacidad de los recursos naturales, entonces se origina en ellos fuerzas que tienden a restablecer el equilibrio natural. Esto provoca que se desaten reacciones tanto en el aire a través de por ejemplo los cada vez más frecuentes y peligrosos huracanes y tifones, en la tierra con los movimientos telúricos, en el fuego, con los incendios forestales y las erupciones volcánicas; y en el agua con los tsunamis o inundaciones.

Mucho podemos hacer al respecto aunque pensemos a priori que se trata de un problema global, demasiado complejo para nuestra posición individual. No se trata de que los gobiernos desarrollen tecnologías que nos protejan de los ataques de la naturaleza. Ni de dejarlo todo en manos de los especialistas del tema del Cambio Climático Global. No debemos ver las reacciones de la naturaleza como ataques o peligros, sino como defensas que ellos manifiestan a nuestra constante agresión. Seamos respetuosos y agradecidos de todo lo que la naturaleza nos ofrece y esa filosofía nos llevara a una mejor coexistencia de ambas corrientes evolutivas que juntas comparten su existencia sobre este maravilloso planeta.